Mitos sobre las hemorroides

Sobre el tema de hemorroides se habla mucho pero ¿Qué ocasiona este malestar tan comentado?

La vena hemorroidal se enferma cuando las paredes venosas se empiezan a distender y pierden la capacidad de regresar el flujo de sangre a una vena mayor. Son una especie de várices en el recto. Los síntomas son: dolor post evacuación, éste puede ser doloroso y punzante, en el 60% de los casos hay sangrado, comezón en la zona y a veces llegan a sentir una bolita.

En el examen físico se hace una clasificación acerca de la localización (puede ser interna o externa) o por grado de severidad (por tamaño).

Algunos mitos acerca del tema son: “No te operes porque vuelven”, esto no es posible ya que en la operación el vaso se procesa y es retirado, sin embargo en el canal anal se encuentran varias venas que pueden volver a inflamarse y presentar los síntomas ya mencionados. El estreñimiento es una posible causa de hemorroides así que es necesario cuidar esa situación en el paciente con hemorroides.

Otro de los mitos importantes a comentar está relacionado con el dolor después de la cirugía: “Si te operas va a doler muchísimo la recuperación”. Esto queda descartado ya que los avances en la medicina se han ido a pasos agigantados en referencia al proceso tanto de la cirugía (menos invasiva) como en la recuperación, haciéndola más cómoda para el paciente y tomando en cuenta que cada persona tiene su umbral de dolor. Los apoyos con medicamentos son para que la molestia sea tolerable para el paciente y deberá ser altamente personalizada.

El tratamiento depende de los resultados de una anoscopia. Las cremas, pastillas son efectivas para quitar los síntomas pero eso no desaparece el vaso hemorroidal. Hay grados en las hemorroides y los tipo 3 y 4 son altamente operables.

Es mejor consultar a un especialista y éste prescribirá lo más adecuado para cada caso.